La subida del alquiler no es por culpa del alquiler vacacional
¿Cuántas veces hemos escuchado que el alza en el alquiler convencional es consecuencia del acelerado crecimiento y demanda del alquiler vacacional?
Este auge de alquilar viviendas a turistas ha traído como consecuencia distintas y diversas declaraciones que parecen satanizar lo que vemos como una diversificación de la economía. Efectos de las nuevas formas de hacer turismo, y de los ingresos que representa para miles de familias que cuentan con una segunda propiedad. Baleares y Cataluña, son las dos comunidades más exitosas para el alquiler vacacional pero también las más controvertidas.
Hablemos de lo que pasa en Barcelona y de un reciente estudio que desmiente lo que se ha dicho como toda una verdad: El alquiler aumenta por culpa de las viviendas turísticas. Resulta que el número de pisos turísticos ilegales en Barcelona disponibles en plataformas como Airbnb se ha reducido durante el último año en 1.076, hasta la cifra de 3.949, y esta reducción se debe a las medidas de inspección impulsadas por el Ayuntamiento, que actúan como medida disuasoria.
El estudio encargado por la Associació d'Apartaments Turístics de Barcelona (APARTUR), sostiene que la subida del precio del alquiler en la ciudad no es atribuible a la existencia de pisos turísticos. En Barcelona estos pisos representan el 1,64% del total del parque de viviendas de la ciudad, que se estima en 825.000 pisos.
Por otra parte, el economista Gonzalo Bernardos ha comentado que es incluso es ridículo acusar al alojamiento turístico de la subida del precio del alquiler, que en Barcelona representa un 1,64% del total de viviendas de la ciudad. El encarecimiento del alquiler se debe entre muchos otros factores al aumento de población con un mayor poder adquisitivo.
Recordemos que Barcelona es una ciudad global, atractiva y mundialmente deseada para pasar unas vacaciones.
Según el estudio: "El incremento del precio del alquiler en Barcelona es directamente proporcional a la disminución del paro". Detrás del encarecimiento del alquiler hay cambios estructurales que se van a mantener en el tiempo, porque la recuperación económica ha llegado y los mínimos de la crisis han desaparecido. El estudio cifra en un aumento del 20,19% entre 2014 y 2016, se trate de una burbuja como la que se vivió antes del 2008.
Por su parte, el índice de precios de la vivienda que calcula el Ministerio de Fomento el nivel de precios de la vivienda libre cayó entre 2008 y 2013 un 26% en Baleares, y desde entonces los precios han crecido un 15 por ciento. Es decir, los precios de la vivienda libre en Baleares siguen siendo más bajos en 2017 que en el máximo alcanzado en 2008. Y el precio de la vivienda suele responder a los cambios en la oferta y la demanda con cierta brusquedad.
Los determinantes de la demanda son muy variados, como los componentes demográficos, la renta y la riqueza de las familias, el coste y la disponibilidad de crédito, y las expectativas de los hogares sobre el precio futuro de la vivienda, no por el auge y la alza del alquiler vacacional.
Si bien en la capital catalana existe un rechazo social, en Baleares la percepción hacia el alquiler vacacional es distinta. En Mallorca, Menorca y Formentera la propia ciudadanía valora con un notable al alquiler vacacional. Incluso en Ibiza, donde ha habido más polémica, los ciudadanos valoran el alquiler vacacional con un aprobado alto, según cifras de la Asociación de Apartamentos y Viviendas de Alquiler de Temporada de Balears (HABTUR). El 54,4% de los residentes de Formentera, seguidos por los de Menorca con un 51,5%, los de Mallorca con un 47,4% y los de Ibiza en un 35% "considera que se debe, incluso, potenciar el alquiler vacacional.
¿Eres un propietario que necesita ayuda para gestionar tu vivienda vacacional? ¡Escríbenos!